El clítoris que vemos mide entre 0,5 a 3,5 cm., pero esto es sólo la punta que vemos de un iceberg de 22 cm. de tejido eréctil, llamado creciente orgásmico.
Por lo tanto hay mucho más que estimular, esto incluye el punto G, la uretra, y el tejido que rodea el frente de la pared vaginal.
Mientras la mujer más explore, más puntos descubrirá. Algunas técnicas para estimularlo son la posición del misionero, donde el hombre se sostiene sobre sus codos, en esta posición la mujer puede pedir que él pase su lengua por el clítoris y además que ponga su labio inferior bajo los dientes para frotar su barbilla y mandíbula sobre el área que hay debajo.
Si él además se preocupa y atiende tu punto G, no querrás salir nunca más de la cama
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