No existe una técnica específica para reducir el dolor en la primera relación sexual. La noción de dolor es individual pues, cada persona tiene un umbral individual de percepción de éste.
Si la persona se encuentra muy tensa, es de suponer que esa sensación será dolorosa. Para situaciones como esa, expertos recomiendan que realicen estos consejos:
Liberar a la pareja de vergüenza ante su propia desnudez.
Explorar y gozar de uno y otro, abriendo las puertas a la erotización completa del cuerpo.
Fomentar la confianza del compañero (a), abriendo la posibilidad a la comunicación mutua. Ambos aprenden como controlar el ritmo al que ejercen o mantienen la excitación.
Fomentar la confianza de la mujer, notando como poco a poco su compañero va dilatando e introduciendo su dedo en su vagina, comprobándole «que no es tan malo como pensaba.»
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