Existen zonas erógenas que excitan más de lo normal a nuestras parejas. En los hombres, cuando se excitan sus testículos se vuelven más sensibles, y el escroto se contrae haciendo que aquellos se eleven y se peguen al cuerpo.
Para que la sensación sea mayor, acarícialos suavemente durante el comienzo. Mientras más los estimulas, más suben. Cuando se encuentre más excitado, sus testículos estarán más listos para un trato más brusco, así que aumenta la presión sobre ellos.
Cuando alcance el orgasmo, los músculos que se encuentran cerca de la parte posterior del escroto se contraerán para ayudar a que el semen llegue al pene. En ese momento, prueba separar los testículos de su cuerpo, este truco sexual tiene resultados mágicos y satisfactorios.
Dejar una contestacion